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Nuestra singular escuela, en ella todos sus practicantes son maestros pues todos los compañeros son susceptibles de aprender y enseñar, en ella cada alumno construye su propia técnica en base a lo que nos han legado las diferentes escuelas marciales pues para nosotros es más importante descubrirnos y desarrollarnos que repetir las mismas técnicas hasta la saciedad ya que no es lo mismo conocer una técnica que saber emplearla, nuestra escuela es una escuela de perezosos pues los problemas que afrontamos así como la situaciones agresivas y violentas tienen siempre más de una solución, entonces preferimos discernir de forma creativa entre las diferentes opciones buscando resoluciones sencillas, sin esfuerzo y necesariamente bellas, pues como artistas marciales creemos que la técnica bien realizada es estética, si no, no sería un arte.

Método del perezoso, academia de artes marciales

Cualquier escuela de artes marciales tiene su partes fuertes y débiles. El fundador de un estilo/escuela es un representante exclusivo que incluye toda su experiencia de vida y actuación en su escuela. Los alumnos solo copian “con éxito o no” la forma de la escuela de su profesor, adaptándose a ella, pero no añaden nada. Con cada generación de adeptos va bajando el nivel de su fundador, perdiendo las raíces espirituales y energéticas. Como sentido en traspasar una base este concepto es válido, pero no provoca el desarrollo de personalidad del alumno, no abre su individualidad ni poténcia hacia la capacidad artística.

Lan Do en realidad no es una escuela como si, no tiene su técnica propia y no enseña algo concreto a nivel físico. Lan Do es un método para estudiar y desarrollar la individualidad de cada practicante. El método esta basado en estudios y prácticas de diferentes coordinaciones entre cuerpo y mente en situaciones extremas, que provocan al alumno reaccionar (combate). En este método se realizan una gran cantidad de situaciones para provocar y analizar la recogida de fuerza y enfoque a voluntad de esa. Esta reacción intuitiva se transforma en un acto técnico que se basa en las diferencias individuales de cada practicante. Se puede decir que practicamos muchas escuelas (cada alumno es su escuela) que se unen en un mismo dojo en la práctica del método Lan Do.

En resumen, se puede decir que el practicante va aprendiendo un amplio espectro de posibles acciones físicas y psíquicas en situaciones de estrés, adaptando múltiples técnicas a sus propias posibilidades específicas. El alumno empieza ha ser el fundador de su propia escuela, no solo en el aspecto físico si no también en el filosófico.

Yanis Vilella Freixes

Escuela de perezosos

Hay que remarcar que el término perezoso en oriente no tiene una connotación negativa, perezoso es la persona que realiza su máximo con el mínimo esfuerzo.